Aranda de Duero es tierra de lechazo asado en horno de leña, de pan de torta y de vino de Ribera del Duero, pero también es lotería. Tras repartir varios grandes premios, la capital ribereña es sin duda una de las ciudades fetiche para los que quieren tentar a la suerte en los sorteos extraordinarios de Navidad y del Niño. Aquí se encuentra de hecho la administración que más vende de Castilla y León: Lotería Mayte. Acaba de ser vendida a un fondo de inversión burgalés y la plantilla se ha visto reforzada para una campaña que ha vuelto a incrementar ventas.
Según explica el nuevo gerente de Lotería Mayte, Clemente Nebreda Rodrigo, en total han puesto a la venta 1.100 números. “Lo que más se está pidiendo este año son terminaciones en 23 y luego también se ha pedido muchísimo el número que dijo la inteligencia artificial, el 03695”, señala.
La familia Serrano continúa en la Lotería 3 de Aranda, donde han puesto a la venta 850 números diferentes. “El más bajo es el 446 y el más alto el 99662”, explica Mayte Serrano, satisfecha porque en ventas este año se ha experimentado un incremento del 18,5%, con respecto al 2022.
Pero, ¿Qué terminaciones están siendo las más solicitadas? Como siempre reinan las habituales: 7, 15, 13 y 69, pero este año están teniendo un protagonismo especial los décimos terminados en 95, 17 y 23. De hecho, no las busquen, están agotadas en todo el país a nivel de terminales. “Las peticiones de clientes de fuera de Aranda han subido notablemente”, explica.
Este año se suma la inteligencia artificial pero luego están las manías particulares, como una fecha señalada, un cumpleaños, un aniversario… “Los números feos se venden bastante bien”, asegura Mayte Serrano con la mirada puesta en ejemplos de este mismo año como los números 3.011 y 1.117.
Según explica el lotero de la administración de la calle Boticas, número 6, no hay un perfil concreto del comprador: hay clientes fijos que durante años juegan siempre el mismo número, pero también hay empresas, familias, gente joven y sobre todo personas mayores que se suelen llevar más porque comparten con los hijos, los sobrinos o los nietos. “Hay mucha gente mayor pero este año he visto más gente joven que otros años”, señala Sebastián De Ribera Guillén.
Grandes premios
La ciudad de Aranda y la comarca de la Ribera saben lo que es que toque la lotería; esa alegría en las calles, esos brindis desbocados, esa felicidad instantánea que une y contagia.
En 2012 la lotería Mayte repartió el segundo premio de El Niño, 4.080 millones de las antiguas pesetas. En 2002 la diosa fortuna volvió a hacer un guiño a esta misma casa con 170 millones de euros y diez años después, en 2012, repartió unos felices 225 millones de euros. Ese día el número, 44260 se vendió de forma íntegra en Aranda de Duero. La peña El Chilindrón repartió el boleto entre sus peñistas y en el resto de peñas de la ciudad por lo que la alegría llegó a muchas familias. “Hemos tenido premio importante cada diez años. El año pasado tocaba pero con el lío de la pandemia todos creemos que este año va a ser el bueno. Ojalá haya suerte”, confía ilusionado desde la Lotería Mayte, Clemente Nebreda.
Fuente original: www.elcorreodeburgos.com