«Cuidar a los mayores te llena, es un trabajo muy agradecido»

Cuando Ana llegó de Asturias a Aranda de Duero hace casi dos años, siguiendo a su marido que acababa de cambiar de trabajo, ella dejó su profesión y pensaba dedicarse a sus hijos. Sin embargo, un anuncio de un programa de empleo le ha cambiado la vida. «Yo he trabajado durante muchos años en Ayuda a Domicilio, pero mi certificado estaba obsoleto y no me valía. Cuando vi esta oportunidad no me lo pensé ni un momento y aquí estoy», afirma.

Ana es una de las 16 personas desempleadas que este año se están formando dentro del programa que organiza el Ayuntamiento de Aranda con el Servicio Público de Empleo de Castilla y León (ECYL). «Este papel que me darán cuando termine en febrero es justo lo que necesito para retomar mi vida laboral», agradece a sabiendas que gracias al formato de esta formación no solo se está actualizando en la atención a mayores, también está percibiendo un sueldo que «sin duda ayuda». «Con este certificado podré no solo trabajar en Ayuda a Domicilio sino también en residencias y centros de día como este en el que estamos del barrio de Santa Catalina».

«Con este certificado podré no solo trabajar en Ayuda a Domicilio sino también en residencias y centros de día»

Ella lo tiene claro: la atención a mayores es un trabajo muy agradecido. «En la pandemia vivía en Asturias y trabajaba en el servicio de ayuda a domicilio. En esas circunstancias tan difíciles te das cuenta de que más allá de llevar un plato de lentejas, somos muchas veces las únicas personas que ven al día. Al final saber que alguien está pendiente de ti reconforta en los casos de soledad no deseada», afirma a sabiendas de que «tristemente cada vez con más».

La formación anual se divide en dos ciclos. En este último se forman trabajando 8 personas de las que solo una es un hombre. «Es el segundo varón que tenemos en la historia. Les llamamos en las entrevistas pero no suelen venir», asegura la responsable técnica del curso, Mirian Ballano.

Desempleadas

Según explica la coordinadora, todos los participantes son personas desempleadas sin más formación que la ESO; parados de larga duración que encuentran en este programa una salida y un futuro. «Esto es una gran oportunidad para todos ellos».

El curso se desarrolla en el centro de mayores de Santa Catalina, en la plaza Hernán Cortés de Aranda de Duero. Cada mañana llegan de la ruta de autobús, 14 personas mayores que son recibidas y atendidas durante 3 horas con cariño y atención. «Tres días por semana hacemos psicomotricidad y siempre empezamos con orientación a la realidad: qué día es hoy, qué ha pasado en las noticias… Luego hacemos estimulación cognitiva y actividades de memoria. La segunda parte del día la repartimos entre charlas, manualidades, juegos de mesa y el viernes el esperadísimo bingo, que les encanta y no puede faltar».

A diferencia del centro de referencia que está ubicado en el centro intergeneracional del antiguo colegio Belén, aquí no hay servicio de comida, aunque muchos cuando llegan a casa tienen la comida del servicio a domicilio esperando. «Aquí lo que hacemos es coger la lista de espera del centro de referencia, pero estaría fenomenal que fuese también un servicio permanente y no dependiésemos de si llega la subvención», destaca la responsable a sabiendas de que gracias a este servicio «apenas hay lista de espera en Aranda».

Fuente original: www.elcorreodeburgos.com