José Ignacio Delgado ha sido durante los últimos años una de las caras visibles de Ciudadanos en la Ribera, Burgos y en Castilla y León, pero ha decidido darse de baja del partido y alejarse del primer plano de la política. Según explica en este periódico el que fuera alcalde de Caleruega durante 19 años, se va agradecido a todas las personas que como él han trabajado “con mucho esfuerzo” para mejorar la calidad de vida del medio rural. “Sabemos lo que es porque siempre hemos vivido aquí”, explica con la mirada puesta en proyectos necesarios como el hospital de Aranda de Duero, el rehabilitado edificio de la Banca Pecho, hoy sede administrativa del ayuntamiento ribereño; o carreteras que se han podido mejorar para conectar los pueblos.
Sin embargo, el declive del partido ha hecho mella y tras la marcha primero de Albert Rivera y después de Inés Arrimadas, y sin olvidar las discrepancias internas; “ha vaciado de sentido” una formación política que venía a cubrir un centro “que nunca ha sido fácil”. “Desde tiempos de UCD tanto la izquierda como la derecha siempre se han intentado apropiar del centro. Bueno, nosotros intentamos ser de verdad centro; hemos trabajado para mejorar las cosas y yo creo que pese a todo, el balance es muy bueno. El centro es una opción que siempre debería estar porque en este mundo de blancos y negros, los grises son muchas veces la solución”.
«Necesito descansar»
Delgado da así un paso atrás y deja la primera fila de la política. “Necesito descansar”, asegura desde su pueblo, Caleruega, donde seguirá ejerciendo como segundo teniente alcalde, mano a mano con la que fue su sucesora, la alcaldesa Lidia Arribas. “No aspiro a más. Lidia es una mujer extraordinaria y está haciendo una labor impresionante, tanto ella como el resto de concejales. Mi idea es seguir trabajando por mi pueblo y mi comarca, como siempre lo hemos hecho, en equipo y con muchísima ilusión”.
En su balance, Delgado destaca logros como la declaración de Fiesta de Interés Regional del Belén Viviente de Torregalindo, la declaración Bien de Interés Cultural de la Virgen de la Cueva en Hontangas; la rehabilitación y el centro de interpretación del Torreón de Haza; el parque del Esgueva en Torresandino; la puesta en valor y el cambio de uso del Palacio de Avellaneda, como futuro hotel de lujo; carreteras como la BU-200, la 922, la 921 y la 912, que está en proyecto. y sin olvidar otras cuestiones en las que ha sido muy reivindicativo como la A-11, “la autovía de la vergüenza” o el tren Directo Madrid-Aranda-Burgos.
Él lo tiene claro. “No es que vuelva a Caleruega porque nunca me he ido de aquí. Aquí tengo mi casa, mi familia y mi vida y eso nunca ha cambiado en estos años”.
Tras 19 años como alcalde de Caleruega, José Ignacio Delgado se convirtió en uno de los pesos específicos de Ciudadanos, como procurador en las Cortes durante dos legislaturas y también como portavoz. “Entiendo que como en todas las etapas todo tiene un principio y un final. Me da mucha pena porque era un proyecto de futuro, pero la realidad es la que es y hay que asumirlo. Me voy orgulloso del equipo que formamos, de toda la gente que se ha implicado; me llevo buenos amigos y gente que merece todo el reconocimiento”.
Más allá de las siglas políticas, José Ignacio Delgado defiende el papel de las personas que se implican para que el medio rural mejore. “Yo creo en las personas y en esas personas que forman grupos. Como saben, estuve antes en otros partidos como TC o el PCAL porque entiendo que más allá de las siglas, porque la política es cambiante, hay que trabajar con honradez y sinceridad, adaptándose a los cambios para que la vida de los pueblos mejore. Yo nunca he vivido de la política ni voy a vivir. He sido fiel a mis principios y seguiré ayudando en lo que pueda”, concluye.
Fuente original: www.elcorreodeburgos.com