Tolbaños celebra la fiesta de la Despedida de los Pastores

La fiesta de la Despedida de los Pastores se ha retomado esta edición con mucha ilusión y ganas, y tras dos años de parón, han acudido a la localidad 300 visitantes, más que en ediciones anteriores, muchos de ellos de fuera. La festividad rememora la importancia que tuvo la trashumancia en la comarca hace varias décadas, y representa el momento en que los pastores abandonaban, al acercarse el invierno, los montes del Valle Valdelaguna en busca de mejores condiciones climatológicas en Extremadura. 

Las calles del pueblo se han llenado de escenas ilustrativas, como una escuela, la antigua casa de comidas, lavanderas y teñidoras en el río, hilanderas de lana y aperos afilando dalles y cuchillos, que han evocado una imagen de la complejidad del oficio durante los años del pastoreo. La mañana ha estado muy animada, hombres y mujeres se han engalonado con trajes de serranas, zahones y zamarras para empezar el día con un desayuno muy pastoril: migas, que se han elaborado de forma tradicional a fuego de roble lento. Tras cantar la Salve en la ermita del Salterio, rogando a la patrona buena suerte en el camino hacia Extremadura, vecinos y visitantes han recorrido las calles con las ovejas hasta el prado de Revilla, para despedir a los pastores con la emotiva canción “Ya se van los pastores, hacia Extremadura, ya se queda la siera triste y oscura…”. 

La localidad ha acogido también un pequeño mercado de artesanía y viandas, una exposición de trashumancia, y un concierto del grupo ‘CastellanAs’, de violín y canto. La fiesta se ha celebrado con gran emoción “Ha sido un día especial, esperemos que los niños no se olviden de como se vivía aquí hace 50 años”, ha comentado Diego Serrano, de la Asociación El Salterio, una de las organizadoras. 



Fuente original: www.diariodeburgos.es