Despistes…..

La soledad, según el escritor inglés Allan Sillitoe, es el rasgo principal que caracteriza al corredor de fondo. Cada afición define a quien la practica. Y el despiste parece ser la cualidad común a la mayoría de recolectores de setas, a tenor de la gran cantidad de ellos que se desorienta en estas fechas buscando los tan preciados hongos. Temporada de setas, temporada de extravíos y de dolores de cabeza para la Guardia Civil, cuyas patrullas son las encargadas de buscar a quien se pierde.

El viernes por la noche un hombre de 61 años que buscaba setas en la proximidades del puerto de La Mazorra pasó toda la noche a la intemperie vagando por el bosque hasta que fue hallado por la Benemérita a las nueve de la mañana del sábado en el monte de Villaescusa de Huidobro. El hombre se encontraba en buenas condiciones físicas aunque presentaba agotamiento.

El domingo por la tarde se perdieron tres aficionados de Aranda de Duero en el monte de Quemada. La Guardia Civil, tras montar un dispositivo de búsqueda, terminó encontrándolos en la carretera de acceso al pueblo, a unos dos kilómetros del municipio.

«Niscalos»

También el domingo, la Guardia Civil participó en la búsqueda de un hombre y una mujer extraviados en el monte de Palacios de la Sierra, cerca de Los Vados, donde habían llegado en un ‘quad’. Los agentes les encontraron a unos 500 metros de donde habían dejado el vehículo. La niebla existente, según explicaron, fue la causa del despiste.

Los seis casos de este fin de semana se unen a los cuatro de la anterior en la Sierra de la Demanda. El primero, el de un padre y una hija que se separaron para buscar setas cada uno por su cuenta. Los dos se desorientaron, pero ella apareció en Huerta del Rey. Allí se dirigió al cuartel de la Guardia Civil para dar aviso de que no encontraba a su padre. Las gestiones de la Benemérita, a través de familiares del hombre, permitieron saber que no se había perdido. Una hora después regresó al pueblo y recogió a su hija.

Por otra parte, una mujer de Salas de los Infantes avisó igualmente a la Guardia Civil porque no había regresado su marido y temía por su salud. Una patrulla, con ayuda de los obreros de una obra, encontró al hombre en perfecto estado de salud y lo trasladó a su domicilio.

Finalmente, varias patrullas de la Guardia Civil tuvieron que salir al monte a buscar a un hombre y una mujer que se habían extraviado en el monte mientras buscaban setas en Vilviestre del Pinar. Tras mantener conversaciones telefónicas con los extraviados a través del móvil, y de recorrer varias pistas de la zona, les localizaron en perfectas condiciones.