La Guardia Civil, en colaboración con INTERPOL y en el marco de la Operación SELONI, ha aprehendido 30 kilogramos en cogollos de marihuana y detenido a J.M.R.C., de 44 años, como presunto autor de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas.
Días atrás, fruto del trasiego de información entre autoridades policiales internacionales -a través de los canales de INTERPOL– y la Guardia Civil, se conocía de un posible e importante cargamento de droga transportada por carretera, procedente del sur peninsular, que podría dirigirse a centro Europa; las actuaciones estaban encardinadas en el marco del denominado Plan Telos.
Este ‘Plan Operativo Integral Contra el Tráfico de Hachís Procedente de Marruecos‘ está dirigido a interceptar los vehículos que, con origen en el país norteafricano, circulan por las carreteras españolas transportando dicho estupefaciente bien en dobles fondos o por cualquier otro modus operandi.
Tras ubicar el vehículo en tránsito por la provincia de Burgos y al detectar que se había parado en una estación de servicio de la autovía A-1, próxima a la capital, se desplegó un dispositivo policial que permitió la identificación del conductor y el registro del habitáculo de carga del camión.
En su interior se hallaron cajas de cartón que contenían bolsas de patatas fritas, aunque un registro más profundo destapó que, ocultas, debajo de las primeras se hallaban otras bolsas de plástico transparente; estas contenían una sustancia herbácea de color verdoso que desprendía un fuerte y característico olor a marihuana, como más tarde se comprobó. En total se aprehendieron 30 bolsas de 1 kilogramo de peso cada una. Las primeras pesquisas descartaron la participación directa del conductor en los hechos, que había sido contratado únicamente para realizar este viaje, ajeno realmente a la carga que transportaba.
Las gestiones siguientes permitieron llegar hasta el verdadero cargador, en la provincia de Málaga, se identificó el inmueble desde el que se había gestado el envío y desde el que partió el transporte; se descubrió a su vez el destino final, un país centro europeo.
Los investigadores se desplazaron a la provincia malagueña donde, J.M.R.C., fue detenido en la vía pública; bajo mandamiento judicial se llevó a cabo un registro a sus propiedades, que permitió la intervención de dos terminales de telefonía móvil y 4.060 euros.
Durante el registro se hallaron indicios relevantes que vinculaban el lugar y a su propietario con los hechos investigados.
Las diligencias instruidas junto con el detenido han sido presentadas en el Juzgado de Instrucción Nº 3 de Antequera, que ha determinado su libertad provisional.
Fuente original: www.elcorreodeburgos.com