Los colegios de Procuradores y Abogados de Burgos presentaron ayer una «queja o denuncia» conjunta ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) en la que afirman que en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 2 de Villarcayo «se han suspendido de manera injustificada numerosos procedimientos» durante los dos meses de la huelga de funcionarios, porque «el funcionario de auxilio judicial no ha estado de huelga en ningún momento». Ambos colegios están, además, recopilando datos de «los múltiples señalamientos suspendidos injustificadamente con grave perjuicio para los ciudadanos y profesionales intervinientes» con el fin de presentar nuevas reclamaciones contra la Administración de Justicia.
En la denuncia ante el CGPJ también sostienen que «algunos de los hechos que aquí se recogen pudieran ser constitutivos de ilícito penal», aunque el asunto no se llevado a Fiscalía ni a vía judicial ordinaria alguna y solo se ha tramitado a través de la vía administrativa.
La sospecha de que se habían suspendido juicios de forma injustificada saltó el 5 de julio, al día siguiente de que se hiciera público el levantamiento de la huelga de funcionarios de Justicia, iniciada el 17 de abril. Ante la convocatoria de elecciones generales y la llegada de un Gobierno central en funciones, los funcionarios volvieron a sus puestos, pero no en todos los juzgados al mismo ritmo. En todos los de primera instancia de la provincia de Burgos (Briviesca Lerma, Salas de los Infantes, Aranda o Miranda) se celebraron los primeros juicios ese 5 de julio, al quedar levantada la huelga. Pero los tres que estaban señalados en Villarcayo se suspendieron.
Aquel día, un total de 9 profesionales, entre abogados y procuradores, además de las partes, en el caso de una de las vistas, acudieron a las dependencias de los Juzgados de Villarcayo. Estando esperando los profesionales a la puerta de la sala de vistas con el funcionario de auxilio judicial necesario para la celebración de las vistas, él mismo manifestó que «no hay ningún problema en celebrar los juicios, ya que él no está de huelga y no lo ha estado desde que se convocó». Pese a esta afirmación, el letrado justificó que se cancelaran las tres vistas de aquel 5 de julio, alegando que «el auxilio judicial está de servicios mínimos y que, por tanto, no se pueden celebrar». Si se celebraron en el resto de juzgados, pero en Villarcayo se basaron en que el sindicato USO no había levantado la huelga.
más notificaciones. En cualquier caso, abogados y procuradores alertan al CGPJ de que «se ha impedido el derecho de tutela judicial efectiva durante dos meses en el Juzgado 2 de Villarcayo, ya que el funcionario de auxilio judicial no ha estado de huelga en ningún momento». Este hecho se corrobora en que en junio de 2022 emitió 541 notificaciones y en junio de 2023, en plena huelga, 628. Añaden que «algún funcionario de ambos juzgados ha manifestado que, aunque no hicieran huelga, tenían que realizar únicamente los trabajos referidos a servicios mínimos». Así, durante los más de dos meses de huelga y en base a estos servicios mínimos, solo se celebraron vistas de asuntos de Familia, si había menores involucrados, y de Violencia de Género. Mientras, abogados y procuradores entienden que estando en activo y no en huelga el funcionario de auxilio judicial, hubo multitud de vistas que se suspendieron de manera «injustificada».
Ante la posible reanudación de la huelga tras el verano y el colapso que la suspensión de juicios podría provocar, los profesionales de la Abogacía y la Procuraduría quieren atajar la situación y que se celebren las vistas en los casos de que haya funcionarios que libremente decidan trabajar y no secundarla.
Fuente original: www.diariodeburgos.es